La semana anterior te invitaba a reflexionar sobre cómo dejar un trabajo que odias.
Cuando alguien tiene claro que el trabajo al que está dedicando un tercio de su vida no es en absoluto gratificante, está preparado para realizar un cambio en su vida.
El problema reside en que después de tanto tiempo haciendo algo es difícil imaginarse haciendo algo distinto para ganarse la vida.
Quizás incluso no tengas muy claro a que te dedicarías si tuvieras que reinventarte por completo profesionalmente.
O puede que sí que lo sepas pero te bloqueas con preguntas del tipo:
Pero… ¿y si realmente luego no me gusta tanto?
¿podría realmente vivir de esto?
¿no es demasiado arriesgando dejar mi trabajo actual?
¿y si no puedo volver nunca más?..
Hoy te traigo los ingredientes fundamentales que ha de tener tu trabajo gratificante:
Money talks
Seamos claros: dejar un trabajo odioso está bien, pero de algo hay que vivir.
Uno de los ingredientes esenciales para que tu trabajo te resulte satisfactorio es que pueda cubrir tus necesidades básicas y el nivel de confort que deseas.
Por mucho que tu trabajo contenga el resto de los ingredientes, si una vez acabada la jornada tienes que ir a la beneficencia para que te ayuden a llegar a final de mes, difícilmente te vas a sentir realizado.
Es muy necesario servir al mundo, vivir el trabajo con plenitud, pero vives en un contexto en el que el dinero es necesario para satisfacer el nivel de vida que deseas.
Evidentemente este nivel de vida debe estar equilibrado de modo que la exigencia del confort demandado no te obligue a encadenar tu vida a obligaciones que te impidan alcanzar el grado de libertad que el dinero te debe proporcionar.
Reflexiona sobre cuál es el mínimo confort que deseas en tu vida para sentirte realizad@ y cuál es la cantidad de dinero que necesitas para satisfacerlo.
Libertad
Si tu trabajo es vivido como una condena es imposible que te sientas realizado.
Sin el ingrediente de la libertad estarás de acuerdo que tu vida será cualquier cosa menos plena, y por tanto el trabajo no puede suponer una limitación.
Evidentemente, la libertad no se puede definir de un modo objetivo, pero puedes evaluarla en tanto tu trabajo te permita poder atender aquellas cosas que son prioritarias e importantes en tu vida.
Para ello por supuesto tienes que tener claras y presentes esas prioridades y no permitir que tu trabajo las rebase a cambio de otras cosas.
En mi caso, mi anterior trabajo me ofrecía un confort extraordinario, realmente muy por encima de mi mínimo deseable.
Sin embargo no era en absoluto libre y no me podía permitir atender cuestiones prioritarias en mi vida.
Aunque ahora no puedo permitirme ciertas cosas, gozo de una libertad que me proporciona una sensación enorme de plenitud.
¿Qué cosas son importantes y prioritarias en tu vida de modo que no querrías que tu trabajo te impidiera poder atenderlas con suficiencia?
Pasión
Por mucho que tengas abundancia del resto de ingredientes, si tu trabajo carece de pasión, es muy posible que tarde o temprano se convierta en una carga.
Hacer algo que te gusta es importante, sobre todo si tienes que emplear 8 horas al día en ello.
Además si estás planteándote dejar un trabajo porque no te resulta gratificante para hacer otra cosa sólo con la idea de que te genere más dinero, siento decirte que va a consumir tu energía y verdaderamente no vas a sentir plenitud al menos durante el tiempo que realices ese trabajo.
Si te vas a poner a buscar una fuente de ingresos alternativa busca algo que te llene, es decir que te guste hacer de verdad.
¿Has escuchado a alguien a quien le apasiona lo que hace quejarse por las horas que trabaja?
Yo desde luego no.
Por eso muchas personas hacen de su hobbie una fuente de ingresos alternativos como es el caso de éxito que te conté de Esther de Pintacaras Facepainting Madrid.
El problema es que la pasión y la obligación no van normalmente de la mano.
Cuando sientes que esa actividad que te apasiona te quita libertad, la satisfacción que naturalmente te proporciona emplear tu tiempo haciendo eso puede desaparecer por completo.
Lo sé, esto más que ayudarte te genera más dudas, pero la respuesta está en una sensación que se denomina flujo.
Esta sensación no es otra cosa que experimentar una total absorción por el trabajo de forma que incluso pierdas la noción del tiempo.
Un buen ejemplo de esto son los artistas y deportistas a los que les apasiona lo que hacen.
Busca una actividad que te apasione tanto que te haga sentir en estado de flujo.
Dejar huella
Si hay un ingrediente que realmente puede hacer que percibas tu trabajo algo verdaderamente gratificante es que éste trascienda a uno mismo.
Esto no es otra cosa que el trabajo realizado posea un alto significado y/o valor para cierta comunidad.
Las personas que sienten que su trabajo tiene un impacto importante en su entorno, encuentran sentimiento de logro, algo que sin duda es deseable en cualquier ocupación.
Algunos ejemplos de trabajos con trascendencia serían:
- realizar actividades de defensa del medio ambiente,
- un artista que con su música hace vibrar a miles de personas,
- un investigador en busca de una vacuna,
- o un profesor que educa a cientos de niños
Sin duda dedicar la vida a un motivo que deja huella proporciona una sensación enorme de realización personal.
El tamaño de la huella no es lo más importante, sino sentir que a través de ese trabajo estás haciendo algo que trasciende a tu persona, y que por tanto le da un enorme sentido a tu vida.
¿Qué cosas admiras y que estando a tu alcance proporcionarían un gran sentido a tu vida?
Por supuesto, como en toda receta, la proporción equilibrada de todos los ingredientes es necesaria para obtener un trabajo gratificante.
No obstante las cantidades dependen de cada persona, pudiendo para algunas ser más valioso dedicar su vida a una pasión que tener libertad, o sentir trascendencia en lugar de vivir con excesivas comodidades.
Lo que sí conviene señalar es que el dinero es un componente extrínsico cuya finalidad es proporcionarte la libertad suficiente para poder ocuparte de cosas que te apasionen y/o que trasciendan, que son los ingredientes que verdaderamente podrán hacer del tuyo un trabajo gratificante.
¿Qué trabajo contiene para ti estos 4 ingredientes?
Cuéntanoslo en los comentarios! smile
COMPARTE! smile – Si te ha resultado interesante y crees que puede venirle bien a alguien, ayúdame a difundir mi trabajo compartiendo este post con estos botones tan chulos de aquí abajo. 1000 gracias! rolleyes
Hola Álvaro. Creo que los 4 ingredientes que mencionas son los esenciales, ni más ni menos:
– que te proporcione ingresos para vivir;
– que te ofrezca libertad;
– que te apasione, y
– que te permita dejar tu huella en el mundo.
El trabajo que yo estoy haciendo ahora mismo de escribir y bloguear tengo que decir que me apasiona mucho. La prueba es que a veces, de noche, cuando va a empezar nuestro programa favorito, por ejemplo, mi pareja me dice: “cariño, ¿no vas a dejarte ya el ordenador? Va a empezar…” (no puedo completar los puntos suspensivos, porque todos tenemos nuestras zonas oscuras que no podemos revelar smile
Y no distinto si es lunes o sábado, o martes…
Eso solo lo puedes hacer si lo que llevas entre manos te apasiona. En definitiva, si es casi un hobby que te da dinero..
Bueno, ya he hablado bastante y no quiero aburrir. Feliz semana a todos!
Creo que tenemos una pasión bastante común.
Me da a mi que tenemos zonas oscuras bastante comunes.
Como siempre muchas gracias por pasar y dejar tu pincelada de sabiduría.
Un abrazo!
Hola Álvaro!!
Estoy pasando más horas delante del ordenador en los últimos meses que casi en toda mi vida, pero no es algo que no me pesa y que, además, me compensa muchísimo.
Ser la dueña de mi tiempo (libertad), escribiendo sobre voluntariado y acompañando a futuros voluntarios en la búsqueda del proyecto que mejor se adapte a sus necesidades (pasión y huella), es sin duda la mejor decisión que ha tomado nunca.
Gran artículo, resume perfectamente la receta perfecta! Un abrazo
Al final, no sé, da igual si vendes coches o vendes afiliados a una ong; todo se basa en tener la visión de la empresa y no rechistar en nada, jefes que no siempre son buenos, compañeros que tampoco, mucho ordenador y contestar correos arriba y abajo. Además, tienes que adherirte 100 % a la ideología que subyace en cada profesión (los médicos tienen una visión del mundo, los profesores otra, los camareros otra….) y te tienes que vestir así o asá, tener entre tus hobbies esto o lo otro, escuchar tal música o tal otra….A mí ningún trabajo o profesión me ha hecho sentir libre jamás. Acabo harta de ver según qué cosas y según qué prácticas y rechazando absolutamente la idea de que eso que hago sirve para algo o a alguien, o a mí misma.