Con los tiempos que corren, tener un trabajo es un privilegio ¿verdad?
Un trabajo significa un flujo de dinero mensual que nos proporciona sin duda una sensación de seguridad. Inevitablemente en nuestra sociedad el dinero es necesario para subsistir y satisfacer las necesidades más básicas que tiene todo ser humano.
Existen, no obstante, muchas personas, que con estas necesidades de sobra cubiertas, caen en rutinas de trabajo exorbitadas.
Algunos de ellos por miedo a perder su puesto de trabajo si no lo hacen, otros por rutina, y algunos simplemente por ambición o placer, presentándose en muchos más casos de los que podamos imaginar claros síntomas de lo que se denomina adicción al trabajo.
La mayoría de abusos y adicciones son rechazados socialmente, sin bien, el hábito de trabajar mucho más de lo “contratado” no es sólo aceptado, sino en muchos casos aplaudido.
Podemos decir por tanto, que este comportamiento se ve sustentado tanto por el reconocimiento social como por el miedo a la pérdida de seguridad o cierto grado de confort. Si a esto le añadimos que a la mayoría carece de conocimientos para alcanzar su libertad financiera, la sensación de estar atrapado se incrementa.
Esto es algo de sobra conocido por las empresas, y es por esa razón que los perfiles de personas ambiciosas, o con responsabilidades familiares, son objetivo a la hora de buscar un candidato que tenga que dejarse la piel.
Falta de liderazgo personal
La educación en nuestra sociedad está diseñada para producir máquinas de trabajar: así se nos ha formado y llevamos esa consigna en nuestro subconsciente.
No es menos cierto que la falta de liderazgo en la propia vida, derivada principalmente de una educación orientada al éxito social muy carente de educación emocional y en habilidades para entendernos a nosotros mismos como individuos, facilita mucho las cosas.
Esto se traduce en que haya muchas personas que escapan de sus vidas para alojarse en el trabajo, ya que ahí es donde se sienten cómodos y más competentes. En su entorno laboral encuentran el suficiente reconocimiento con la intención compensar las carencias de afecto que habitualmente deberían de recibir en su vida social o sentimental.
La mayoría, tarde o temprano, acaba haciéndose esta pregunta: ¿Trabajo para vivir, o vivo para trabajar?
La realización a través del trabajo
Karl Marx dijo que el trabajo dignifica al hombre.
Según la RAE dignidad es excelencia, realce.
Personalmente, no considero que una vida sea excelente por el mero hecho de tener un trabajo. En mi humilde opinión, la excelencia en la vida (y por tanto la dignidad) es proporcional al grado de realización o sentido que se alcance en la misma.
Miles de personas se levantan cada mañana para vivir la vida soñada por otros. Clic para tuitear
Lamentablemente en nuestra sociedad escasea y mucho el sentido de vida, y es por eso que muchos emplean su tiempo en aquello que, ya sea por razones culturales, familiares, sociales o simplemente por convicción propia, se supone que tienen que hacer, y como hemos visto, el trabajo, es un lugar con muy buena reputación..
Por supuesto, hay personas que trabajan muchísimas horas porque se sienten plenamente realizadas con su trabajo, ya que lo que hacen es para ellos algo vocacional.
Lo que diferencia a los que trabajan de una forma vocacional de los que no, es su sensación de fluir y de libertad: disfrutan de aquello que hacen.
Descubre tu relación con tu trabajo
¿Sientes que pasas muchas horas en el trabajo y esto te desagrada?
Te propongo hacer el siguiente ejercicio de reflexión:
- ¿Desatiendes a tus amigos o familia por cuestiones laborales? (también en casa o situaciones sociales como hablando por el móvil en un restaurante o contestando correos electrónicos, etc.)
- ¿Trabajas más de lo que consideras razonable?¿mucho más?
- ¿Te gustaría dedicar tu vida a hacer otra cosa?
- Revisa y ordena tus valores prestando especial atención al lugar que ocupan: familia, amigos, dinero, reconocimiento, sacrificio, salud y ocio. ¿Estás atendiéndolos por orden de prioridad en tu vida?
- Piensa ahora en tu rutina de jornada laboral extendida y responde:
-
- ¿Por qué y para qué trabajas tantas horas?
- ¿Estás huyendo de algo?
- ¿Fluyes y te sientes libre mientras trabajas?
- ¿Sientes envidia de compañeros que trabajan menos tiempo que tú, y los juzgas por su falta de implicación en el trabajo?
Te dejo con tus respuestas, espero que te ayuden a “despertar” de tu rutina o al menos a comprender mejor tus motivaciones.
Y si quieres salir de esa situación de insatisfacción, te animo a contactar conmigo a través del formulario de contacto.
Yo aquí me despido, con una pregunta obligada:
¿piensas seguir así, o vas a replantearte la relación con tu trabajo?
Piensa bien la respuesta y recuerda que vas a dedicar en ello aproximadamente un tercio de tu vida…
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Creo que muchas personas utilizan el trabajo como vía de escape para no ocuparse de sus vidas. Identifican trabajo con vida y así consideran que, teniendo trabajo, tienen vida. Pienso que es un error. La vida es algo mucho más amplio y el trabajo simplemente una parte de ella. Lo importante es vivir.
Totalmente de acuerdo Agustín. No hay tal cosa como vida labiral y vida familiar, hay una vida y es responsabilidad de cada uno de nosotros respetarla en toda su extensión.
Gracias por comentar!
pues os explico actualmente estoy en paro pero cuando me sale un trabajo que ahora mismo me salen pocos pues no echo mas horas porque quiera evadirme de nada si no por que no tengo mas remedio que echarlas por que no soy yo quien decido las horas que trabajo si no mi jefe no todos tenemos la suerte de tener padres o madres famosos y poder vivir del cuento algunos tenemos hijos que alimentar y tenemos que tragar con lo que nos pidan a pesar de ser también muy buenas personas de ser graciosos y de gustarnos la buena vida y el buen comer y beber como a todo el mundo pero tenemos que callar y trabajar para no perder nuestros puestos de trabajo de mierda y ya digo eso cuando lo tenemos la vida para algunos no es cuestión de decisiones propias si no de una lucha diaria para poder comer cada dia es muy fácil reflexionar y decir papochadas de este tipo cuando tenemos la vida prácticamente resuelta tocándonos la polla todo el dia pero en fin no quiero enfadarme me parece cojonudo que algunos aprovechen la vida que les ha tocado pero encima no pretendáis hacernos a los demás gilipollas haciéndonos preguntas de mierda cuando solo tenemos una salida trabajar si hay trabajo y sobrevivir
Hola Enrique,
Entiendo perfectamente lo que dices y me hago cargo porque tengo personas cercanas que se encuentran en una situación similar a la tuya.
Tu mismo indicas en tu comentario lo que crees que debes de hacer con respecto a tu trabajo, así que si esa es tu guía personal, lo demás sobra completamente.
Yo soy optimista y creo que tenemos elección, pero por supuesto esa es mi visión y creencia personal.
Seguiré escribiendo lo que pienso y experimento, pues a mi me funciona en mi vida, y estoy convencido que a otras muchas personas les aporta de un modo positivo.
Siento que no sea tu caso y que lo que te genere es tanto mal estar como para responder de una forma tan soez y poco educada.
Gracias en cualquier caso por tu crítica.
Un abrazo